Cuando conseguimos la plaza para poder participar en la
TDS®,
CCC® y
UTMB® sabiamos que nos ibamos a enfrentar a un trazado exigente, que los
números no engañan cuando hablamos de longitud y desniveles, por eso y
por que nos gusta, entrenamos, entrenamos y entrenamos. Habia que llegar
fuertes y creo que así lo hicimos, y solo los infortunios y mala suerte pudieron con
Juan y
Fede.
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Los primeros en tomar la salida fuimos
Paco y
yo, para enfrentarnos a los
114 km. (2 más de lo previsto), que nos esperaban bajo unas previsiones meteorológicas que asustaban.
El cielo de Courmayeur nos dejaba muy claro lo que estaba por venir, lluvia, nieve, granizo, niebla y barro, muchisimo barro.
Siguiendo nuestra "costumbre", decidimos salir los últimos, que ya tendriamos tiempo de ir subiendo posiciones, aunque por el camino pillaramos más de un tapón que nos paró en seco.
Como el que vivimos en el
Col de la Youlaz que nos retuvo 20 minutos bajo una intensa lluvia...
...pero una vez coronado tiramos para abajo buscando la población de
La Thuile.
Tras comer y beber, otra vez a subir, buscando el Col del Petit ST.- Bernard
Tras descender a
Bourg St. Maurice acometimos la subida más larga de todo el recorrido, la ascensión del
Paseur Pralognan.
Una ventana de buen tiempo se abrió durante parte de la subida, aunque fue solo un espejismo...
...que duró hasta la bajada del Col de la Forclaz y nos acompaño el resto del dia.
Tras pasar el
Passeur Pralognan acometimos la peligrosa bajada al
Comet Roselend...
...desde aquí ya no hay fotos, el agua que entró en la bolsa "estanca", que con tanto "cariño" habia preparado horas antes, me cortó mi ansias de fotógrafo oficial. Desde aquí solo nos separaba del triunfo un mundo, en el que el
Col de la Gitte,
Col du Joly,
Chalet du Truc y sobre todo el "poderoso"
Col du Tricot nos harian comprender, una vez más, que aquí nadie te regala nada y que hay que estar dispuesto a asumir el binómio sufrimiento-disfrute, para que la meta se vaya acercando casi sin darnos cuenta.
Un
carrerón, así defino la
TDS®, gloria para el que la diseñó.
Lo he pasado "de vicio", me voy con la certeza de
"que quiero montañas, barro, lluvia, nieve, frio, calor, colegas y ultras", como las que desde hace años tengo la enorme suerte de disfrutar.
Vuelvo a sentirme un
PRIVILEGIADO.
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Los siguientes en tomar la salida fueron Fenando, Pepe y Juan que desde la población italiana de Courmayeur..,
...afrontarian el exigente trazado de la CCC®, el cual sería "recortado", palabra de moda ultimamente, por las inclemencias meteorológicas.
Aquí vemos a Pepe acercandose a la merecida linea de meta.
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Ya solo quedaban
Luis e
Iñaki en enseñar los "dientes" a la reina de las pruebas, la
UTMB®.
El perfil no se corresponde con la realidad debido a la "mutilación" que la organización hizo del recorrido aduciendo problemas para salvaguardar la seguridad del corredor.
La luvia no dejo a la afición en sus casa, y ahí estuvo empujando a sus "chavales"...
...hasta la meta.
Eso sí, alguno pagó con un rato de camilla su ímpetu y tesón.
Fue solo un susto, que encima "aprovechó" para sumar nuevos fichajes al club.
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Luego vinieron dias de montaña y turismo.
Seguro que si me tengo que quedar con algo de esta nueva aventura alpina, será con los buenos momentos y risas que hemos compartido toda la familia SALTABALATERA..
La frontera nos alimentará,
La frontera nos apagará la sed,
La frontera nos consolará,
La frontera nos vestirá.
(Canción de contrabandistas).
